Mercurio retrógrado

Lost in translation: La información que se perdió por el camino.

En la mitología griega Hermes (Mercurio para los romanos) era el mensajero de los dioses y en concreto de Apolo (el sol). Mercurio es el planeta más próximo al sol y debido a esta proximidad siempre le ofrece la misma cara (como la luna a la tierra). Esta proximidad le convierte en el intermediario entre el sol (nuestra consciencia, el propósito de nuestra vida) y el resto de los planetas. Es el gran trasegador de información en los dos sentidos: hacia y desde el sol. Ahora bien, ¿qué sucede en estas comunicaciones cuando mercurio está retrógrado?. Primero consideremos qué pinta mercurio en tu carta natal. Mercurio actúa como portavoz del sol hacia el resto de los planetas y como un “informador” del sol contándole en que andan metidos todos esos planetas y sus interminables conflictos. Mercurio les hace saber que ha decidido “el jefe” sobre este o aquel tema, zanja conflictos entre planetas, propone acuerdos, sin tomar parte directamente en las discusiones entre ellos, pero monopolizando el intercambio de información con nuestra consciencia. Sin embargo, muchas veces, parte de esta información se pierde. Llega a una consciencia demasiado ocupada con otras cosas (resolver conflictos entre planetas, gestionar tránsitos difíciles) o simplemente un poco perezosa como para ocuparse con todas las “minucias” con las que le molesta el diligente (y cotilla) mercurio. A veces es simplemente cobardía: mercurio también nos comunica las malas noticias, los trabajos pendientes, los conflictos que comienzan a formarse, etc. A veces un sol en baja forma decide mirar para otra parte y hacer oídos sordos a las informaciones que le transmite mercurio.

Mercurio retrogrado manifiesta muy a menudo las consecuencias de la perdida (intencional o no, parcial o total) de está información que se “perdió” en su viaje entre el sol (la consciencia) y los planetas. A nivel práctico esto se traduce en cosas como dificultades en los mil y un papeleos que inundan nuestra vida cotidiana porque olvidamos leer la “letra pequeña” de un contrato o un documento oficial. Comunicaciones que se cortan o se pierden. Malentendidos, miedos a comunicar. Mercurio retrógrado nos puede llegar a exasperar con su “ya te lo dije”.  Conviene ser humilde y reconocer que muchas veces uno no tiene ni el tiempo ni la energía de procesar toda la información que el incansable mercurio nos proporciona.

Mercurio puede también manifestar su “lado oscuro” durante la retrogradación: no en vano el planeta de los pies alados (y las manos ligeras) hace incursiones en el terreno de la maledicencia, el hurto y otros juegos de manos. Tened en cuenta que mercurio no está especialmente obsesionado con los aspectos éticos o legales de nuestras acciones (estos “detalles” entran más bien en la esfera de Júpiter y Saturno respectivamente). Dependiendo de la casa de nuestro tema natal donde mercurio haya retrogradado (esta última vez ha sido entre los grados 23 y el 14 de Tauro durante el periodo que va del 29 de abril al 23 de mayo) estos efectos se habrán manifestado en una u otra esfera de nuestra experiencia. En mi caso, mercurio transitaba mi casa cuarta (el hogar). Durante este periodo los ladrones “visitaron” mis dos domicilios (observad también que mercurio estaba en Tauro signo de los valores materiales). Por otra parte tenía en mente escribir esta serie de artículos desde hace semanas, pero nunca conseguí reunir la energía necesaria para acometer tamaña empresa y es que mercurio retrógrado es un gran procrastinador (escribir es una actividad típicamente mercuriana).

Para comprender los efectos de este paso de mercurio retrógrado tenemos que considerar también que otros planetas de nuestra carta natal se encuentran en la zona por la que mercurio transitó o están formando aspecto con él. No perdamos de vista tampoco la posición y los aspectos que mercurio forma en nuestra carta natal. Esto nos dará pistas para entender que sucedió durante esta retrogradación.

Seamos positivos. Bien mirado mercurio retrógrado nos da una segunda oportunidad para corregir pasados errores de comunicación, nos permite enderezar entuertos, aclarar malentendidos (y pedir disculpas por pasadas maledicencias). También nos ayuda a ser más reflexivos y a no precipitarnos a la hora de comunicar (o de escribir sobre mercurio). En el caso del robo en mi casa, yo ya sabía que la ventana por la que entraron los ladrones era muy vulnerable (incluso mi seguro me lo había advertido por escrito, pero ¿quién lee los papeles del seguro?). De manera que no culpemos a mercurio y pongámonos manos a la obra para corregir todos los flecos que dejamos sueltos en el pasado. Cuanto más conscientes seamos de las maneras de operar de mercurio retrogrado mejor podremos entender que a veces para dar dos pasos hacia delante hay que dar uno hacia atrás.